La osteopatía es una disciplina que pone especial atención a la estructura y el equilibrio bio-mecánico del cuerpo. En realidad, se trata de una especialidad cercana a la fisioterapia y de hecho comparten una gran parte de base teórica. Dicho esto, la osteopatía se diferencia en la forma de plantear los tratamientos, ya que busca un enfoque más global y orientado a remediar los desequilibrios entre distintas partes del cuerpo.
En nuestro centro, consideramos que la osteopatía otorga a nuestros terapeutas un entendimiento más profundo de las lesiones y les proporciona importantísimas herramientas adicionales tanto a la hora de realizar diagnósticos como de aplicar tratamientos. Por esta razón, todos nuestros fisioterapeutas son osteópatas certificados
Beneficios de la osteopatía
La osteopatía permite eliminar las restricciones de movilidad de los diferentes elementos del organismo. De este modo, no sólo elimina la sintomatología asociada (típicamente dolor articular o muscular) sino que también previene lesiones compensatorias.
Las técnicas osteopáticas son particularmente útiles para tratar patologías
como:
• Hernias discales
• Tortícolis
• Pitidos en los oídos
• Problemas digestivos
Además, permite abordar otras dolencias, que no tienen un fácil tratamiento mediante la medicina convencional, como son:
• Dolores de cabeza crónicos
• Migrañas
• Vértigos
• Bruxismo
• Cólicos del lactante
Más sobre la osteopatía
Equilibrio biomecánico
Una de las características de la osteopatía es que se estudia la relación entre los distintos sistemas que componen nuestro organismo (músculos, huesos, ligamentos, tendones) y examina el impacto que puede tener un trastorno en un punto concreto en el resto del cuerpo. En este sentido, esta disciplina incide mucho en buscar la causa primera que da origen a cada disfunción, lo cual corresponde plenamente con nuestra filosofía de tratamientos.
Cadenas lesionales
Pongamos un ejemplo:
supongamos que un individuo se daña un tobillo. Su reacción inconsciente será
la de alterar el movimiento de la rodilla para suplir al tobillo. Esta
compensación, que temporalmente resulta inofensiva, puede acabar provocando una
lesión si se mantiene en el tiempo. De hecho, en muchas ocasiones el
desequilibrio generado puede ser más grave que la lesión original.
Por lo tanto, la osteopatía defiende que no sólo
hay que investigar el origen del dolor, sino que es necesario tratar todos los
posibles desequilibrios que pueda haber desencadenado, lo que se conoce como
“cadenas lesionales”..
Buenísimo el post. Un cordial saludo.